En 1898, España pierde las últimas colonias en América, hecho que marcó
las conciencias de los españoles durante aquellos años ya que supuso un severo
varapalo en nuestra sociedad. Antes, en
Filipinas, el entonces joven Alférez Millán-Astray, con sólo 16 años,
participó en la guerra, donde obtuvo notable popularidad por su valentía en
combate. Precisamente esta experiencia, junto con la posterior derrota
mencionada, le hizo ver la conveniencia de emplear en las guerras exteriores
soldados profesionales. Ya más adelante, en 1909, siendo ya Millán-Astray
Oficial de Estado Mayor, tuvo lugar la Semana Trágica de
Barcelona. En ese mismo año, en verano, desde Marruecos, el General Marina solicitaba
del Gobierno refuerzos militares urgentes. El entonces Ministro de la Guerra , Arsenio Linares,
movilizó a los reservistas, es decir, reclamaba a filas a soldados
"veteranos”, hombres ya con familia y trabajo. Por tanto, la necesidad que había avistado
Millán-Astray estaba clara, era necesario un cuerpo militar de élite que
fundamentalmente se hiciera fuerte en Marruecos, donde no era suficiente con
las tropas de reemplazo.
Así las cosas, fue ya en 1919 cuando, con 40 años de
edad y siendo Comandante, el proyecto de Millán-Astray
toma
cuerpo en forma de Legión Extranjera. El Estado Mayor estudia su propuesta, que
tendrá la aprobación tanto del Ministro de la Guerra como del Alto Comisariado de España y
Marruecos, iniciándose definitivamente la creación del Tercio de Extranjeros.
El paso siguiente será enviar a Millán-Astray a Tremecen y a Sidi-Bel-Abbes
(Argelia) para convivir como un oficial más entre los legionarios franceses
durante el mes de octubre de 1919, puesto que los franceses ya estaban
preparando un proyecto similar en Marruecos. Como consecuencia de esta
experiencia, Millán-Astray concibe para España un Cuerpo similar a la Legión Francesa ,
basado en la tradición de los heroicos tercios españoles bajo estas palabras:
"Los Legionarios serán los dignos sucesores de los Tercios de Flandes,
Italia y América, con el mismo concepto del honor, del deber y del
sacrificio".
El 2 de septiembre es nombrado
Mando del Tercio el ya Teniente Coronel de Infantería José Millán-Astray
Terreros. Dos días después, aparece en el Boletín la organización del Tercio de
Extranjeros: "Este cuerpo habrá de emplearse tácticamente como de primera
línea y en todos los servicios de paz y guerra, sin otro límite que el de su
utilidad militar". Por otra parte, en esta época, Millán-Astray conoce al
Comandante Francisco Franco que, avalado por su prestigioso historial militar,
pronto se convertirá en Jefe de la Primera Bandera. Desde ese momento, la mística y
el activismo ha estado siempre ligado a esta particular unidad militar. De
hecho, el día de hoy en que conmemoramos el aniversario de la Legión , no lo es por su
fundación como tal, sino por la fecha en que se alista el primer legionario. Marcelo
Villeval Gaitán era su nombre, natural de Ceuta. Rápidamente le siguieron
centenares de hombres, futuros caballeros legionarios que han ido conformando
su historia.
Posteriormente, el historial
militar de la Legión
se fue engrandeciendo a lo largo del siglo XX. Su participación en la Revolución de Asturias
en 1934, primero, y en la Guerra Civil ,
después, fueron fundamentales para la victoria del bando nacional. Durante la
misma, además, en 1937, se pasa a la denominación actual de esta unidad como “La Legión ”. Más adelante, la Legión interviene en la
conocida “Operación Barbarroja” en la Segunda Guerra Mundial. Allí, con la División Azul, la
conocida en la estepa rusa como Legión Azul, porta el credo
legionario por todo el Frente Oriental. Siguiendo cronológicamente, el Cuerpo vuelve al
combate a su lugar de origen, el norte de África, donde se emplea en la Guerra de Ifni y en la
“Marcha verde”. Ya desde los 90 y hasta la actualidad, los “cascos azules”
legionarios intervienen en misiones de paz en Bosnia, Albania, Kosovo o Macedonia. Y ya última y
actualmente, en Irak, Afganistán, Congo y el Líbano.
A día de hoy, los Tercios de La Legión son el “Gran
Capitán” y “Duque de Alba”, que forman parte de las Comandancias Generales de Melilla
y Ceuta respectivamente; el
"Alejandro Farnesio" de Ronda (Málaga); y el Tercio "Don Juan de
Austria" en Almería, donde hoy se celebra esta fecha. Es difícil plasmar sobre el papel la enorme
tradición y múltiples
características particulares de esta unidad militar y de la propia vida
legionaria. Seguramente, el mejor resumen posible sea reseñar los epígrafes del
credo legionario: El espíritu de compañerismo,
el espíritu de amistad, el espíritu de unión y socorro, el espíritu de marcha,
el espíritu de sufrimiento y dureza, el espíritu de acudir al fuego, el
espíritu de combate, y el espíritu de la muerte. O, lo que es lo mismo, el espíritu de La Legión. Feliz aniversario para
todos los Caballeros y Damas legionarios de ayer y de hoy, pues quien ha lucido
el chapiri (gorro legionario) con honor, lo es para siempre.
Luis F.V.
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