Decepción en el Molinón, el nuevo empate del Atlético aparta al equipo colchonero de la oportunidad de asaltar los puestos de Champions League. Se puede decir que el Atlético fue superior a un Sporting correoso, pero nuevamente la falta de puntería, el poco acierto en los cambios y cierta mala fortuna, condenan a sumar otro empate que sabe escaso.
Comenzó el partido con dos fallos monumentales en la definición, primero Falcao ante Juan Pablo, después Godín a la salida de un córner, perdonaron al Sporting. El recuerdo del mal trago pasado en Santander hace una semana comenzaba a rondar Gijón. Del Sporting se pudo ver en los primeros minutos lo esperado, un equipo extra motivado por el cambio de entrenador, una afición dispuesta a resetear y un técnico implantando su sello en el equipo.
Los primeros minutos discurrieron con mucha intensidad, el Sporting rascaba abajo, mientras el Atlético sin monopolizar el juego daba sensación de peligro. Llegados al minuto 20 se produjo el primer gol del partido. Una jugada eléctrica de Adrián después de romper a Gregory, la envió Roberto Canella a su propia red. Jugada muy propia del delantero asturiano, perfecto en la realización, defectuoso en la ejecución. Se adelantaba el Atlético, lo que en la era Simeone es sinónimo de éxito.
Pero este nuevo Sporting no estaba dispuesto a rendirse, empujados por el ímpetu de Barral, Eguren o André Castro, el equipo asturiano siguió presionando al Atlético, más deseo que fútbol, pero al fin y al cabo no se rindió. Avisó Gregory al saque de una falta lateral, no perdonó Eguren en el 36 después de un barullo en el área. Pudo haber mano en el control del esférico del uruguayo, muy dudoso como para señalarse. Empataba el Sporting, agarrándose al partido y a la primera división.
No le sentó mal el gol al Atlético que pareció reaccionar, apoyados en un gran Koke, un participativo Diego y un no tan desacertado Gabi, el equipo de Simeone siguió con su plan establecido, entrar por bandas y esperar a que Falcao definiera. Pudo ser Diego el que adelantara al Atlético al borde del descanso después de un buen centro de Juanfran, pero Juan Pablo abortó la ocasión después del disparo a bocajarro del brasileño. Con el susto en el cuerpo para los de Clemente se llegó al descanso.
El inicio de la segunda parte dibujó un escenario diferente, salió el Sporting mucho más enchufado, llevando el ritmo del partido y retrasando las líneas del Atleti quince metros. Sin embargo, al equipo asturiano le falta calidad en todas las líneas, esperanzador es el papel que puede jugar la incorporación invernal de Colunga, vertical y veloz partiendo desde banda izquierda.
Viendo que el partido se complicaba ciertamente, Simeone decidió iniciar una serie de cambios muy desafortunados. El primero en salir fue Koke por el "Rubenesco" Salvio, jugador de pincelada gruesa y fútbol difícil de entender. El cambio sirvió para ayudar a cerrar la banda de Canella y Colunga que estaban dando ciertos problemas, pero ofensivamente no aportó nada.
Pareció aturdir más el cambio al Sporting que favorecer al Atlético, los primeros minutos de los asturianos se difuminaron y el Atleti comenzó a ganar terreno. Gabi rozó el gol después de un fuerte derechazo. Empezaba el Atleti a rondar el gol, pero Falcao tampoco estaba por la labor hoy, los gritos de los detractores comienzan a tener cierto fundamento. 45 millones de euros no merecen desaprovechar tantas, y tan claras, ocasiones.
Mediado el segundo tiempo llegó la peor noticia para los colchoneros, Diego se tenía que retirar del campo por un pinchazo muscular, el esfuerzo de Roma le ha salido caro al Atlético. Diego y Arda K.O. Sustituyó al mediapunta el portugués Pizzi, no es necesario comentar lo que perdió y no ganó el equipo con el cambio.
Aún así el Sporting comenzó a desfondarse y acularse en el arco de Juan Pablo al tiempo que Salvio alternaba una de cal y una de arena, tan pronto se tropezaba con sus piernas, como realizaba una gran jugada que nuevamente no aprovechaba Falcao. Hasta 3 oportunidades claras más tuvo el colombiano, más madera para los enemigos del colombiano.
El partido entró en un correcalles que pudo acabar con el triunfo local, pero Courtois rechazó por bajo un mano a mano a Adrián Colunga, el Atlético tampoco corrigió los defectos en la definición que le condenaron al empate en Santander.
El partido finalizó con un empate que sabe a poco al Atlético, tras visitar a dos equipos en descenso, el equipo colchonero solo ha podido rascar 2 puntos de 6 posibles. Pobre bagaje para un equipo que sigue desaprovechando oportunidades para establecerse en la ansiada Champions.
El próximo choque será en Europa League con la eliminatoria (casi) decidida después del 1-3 frente a la Lazio. Sin duda la sombra alargada del Barcelona planea en el horizonte, próximo domingo a las 21,30.
El partido entró en un correcalles que pudo acabar con el triunfo local, pero Courtois rechazó por bajo un mano a mano a Adrián Colunga, el Atlético tampoco corrigió los defectos en la definición que le condenaron al empate en Santander.
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A.Briega
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