Cerró el circulo el Atleti ante el Zaragoza. Después de una magnífica primera vuelta, el conjunto de Simeone ha completado una primera vuelta perfecta en el Calderón. Sin peros, sin estridencias, completando partidos muy buenos o simplemente buenos, pero al fin y al cabo victorias. Ayer fue el Zaragoza al que le tocó pasar por la licuadora rojiblanca. El término pasar es muy apropiado para los maños, porque los zaragocistas no hicieron nada, exclusivamente pasar el rato.
Fue un rodillo el Atlético en los primeros minutos. Transiciones rápidas de balón e incorporación de los laterales como tarjeta de presentación. Y así, llegaron rápidamente las primeras ocasiones. La tuvo Falcao tras un excelente servicio al espacio del renacido Tiago. No acertó el punta colombiano que ha entrado en un pequeño bache propio de los designios de la temporada.
Con el juego volcado sobre el área de Roberto, abrió la lata el Atlético tras un saque de esquina. Jugada "made in Simeone" que evoca al Atleti de Antic. Córner a la corta y remate certero. Esta vez el turno fue de Tiago, el cual completaba un magnífico partido.
El gol no estimuló a un Zaragoza incapaz de estimularse ni con once modelos de Victoria Secret frente a ellos. No había partido.
Puso más tierra de por medio Falcao tras un penalti tan claro como absurdo cometido sobre Arda Turán. El turco firmó un armisticio con la grada del Calderón después de sus inoportunas declaraciones navideñas. No hay paz completa, pero hay cimientos para llegar a ella.
Tras el descanso con el partido resuelto, el Atlético se dedicó a mirarse el ombligo y pensar en el calendario venidero, que no es poco. Sólo Arda Turán y Falcao amenizaron la velada con una serie de jugadas propias de peloteros de su clase. Caviar puro.
No deparó nada más la segunda parte con un Zaragoza K.O por incomparecencia y un Atleti reservón. Un vuelta de 10 para el Vicente Calderón. Y afianzándose en la segunda plaza, que no es poco...
A.Briega
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