sábado, 5 de noviembre de 2011

0 Con la música a otra parte

Cayo Lara estaba indignado antes que Hessel inventara el término. Inventara el término en su sentido más pijiflauta se entiende. Por eso sientan bien las mañanas de barómetro de CIS: los 8 diputados que les asignaban se deben a que Cayo no lea a Hessel y Llamazares no haya leído a nadie.

Pero exigir cambios no puede suponer un aislamiento.

-“Podía antes ventilarse la atmósfera confinada de un país abriendo las ventanas que dan sobre otro. Pero ahora no sirve de nada este expediente, porque en el otro país la atmósfera es tan irrespirable como en el propio”.

Ahí Grecia y de ahí España. Y el socialismo que anticipaba Ortega.

Ahora que el conservadurismo light progresa en las encuestas oficiosas y oficiales, el socialismo no ha de combatirse con ideas sino con…canciones. Aquí los muchachotes del PP, que lo mismo se estampanan con dos copas de más en Serrano que montan una orquesta zíngara que critican la ayuda a África. Rebeldes efebos para la mansedumbre de la casa.

La música como arma de guerra, el método de exaltar de Mussolini.

Así las cosas, dispuestos a bailar le dedican unos versos a Alfredo Pe Punto el que fuera Presidente del G… La canción de “Alfredo no te creo” que pondrá banda sonora a la campaña del PP no resulta tan pegadiza como el dichoso himno de los populares. Desde que le sonó al gordo aquel que se sentaba detrás de usted en el restaurante ¿cuántas veces la ha tarareado en casa?

No exigen, todo sea dicho, el abrir las ventanas de casa con tan lustrosa canción. Como no aceptan los debates en internet por miedo a un error del candidato de barba cuyo primer fallo ha residido en el salto a la palestra junto a Sanchez-Camacho, torpona política por excelencia cuyo hijo “habla catalán en la intimidad” y a quien hace tiempo debieron mandar con la música a otra parte.

Darío Novo

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