0 Crónica 6ª etapa: Úbeda-Córdoba

Alta Velocidad Liquigas

Peter Sagan se impuso al sprint entre 3 Liquigas, entre ellos Níbali y Pablo Lastras. Purito Rodríguez principal baza española pierde 17”.

            Es posible que cuando los responsables de la DGT (que los hay) observen los videos del descenso del puerto de ayer hayan hecho una buena recaudación en radares. Fue una bajada de lo que se suele decir a tumba abierta pero más. Y sirva también otro cargo más al de la alta velocidad: el mismo fue producido por un conjunto de vehículos que respondían al nombre de Liquigas y cuyo responsable era un tal Vicenzo Nibali. Encontraron también un aliado en Pablo Lastras. Hemos hablado tanto de la hombría y del coraje de Penkas que nos hemos quedado sin calificativos para él. Lo de ayer fue otra lección de ciclismo y como bien apuntaba Luis Valladares vía Twitter sirvió también para aclarar a algún despistado en Córdoba que la cabeza de carrera no respondía a una contrarreloj por equipos.

            Fue así un final estadísticamente claro. Entre los cuatro Liquigas y Lastras estábamos al 20% de posibilidades, algo más que ganar la Lotería, pero difícil en cualquier caso. A 700 metros del final, Nibali fue lanzado de tal manera que ganó a Pablo esos 5 metros de ventaja que a esa velocidad y distancia de meta parecen una nueva etapa. Pero era el Penkas. Y consiguió reponerse y volver a unir al grupo. Esta vez la cosa se jugaría al sprint. Liquigas jugó de manera excepcional sus cartas aunque nos carcomía el ver a Pablo encerrado entre tanto italiano. Se les olvidó que sabe más el Penkas por ciclista que por diablo y en un par de patadas que destrozan los platos. Se metió muy bien por la derecha y sólo, y repito sólo cuando el Liquigas vio que sería el ciclista español quien iba a alzar los brazos en meta, Peter Sagan salió con la velocidad que le caracteriza y lo impidió. Bravo a Pablo y bravo al Liquigas, que intentó con todas sus armas colocar a Nibali entre los tres primeros puestos que ofrecen las bonificaciones tras una bajada técnicamente kamikaze.

Un grupo de varios grupos

            La subida a lanzó la carrera como los últimos días: desmontando escapadas y dejando un selecto grupo de 40 corredores entre los que se repartirán todos los pasteles. Saltó Moncutie, con más ganas que cabeza como en el día anterior. Y fue otro de los que suele animar la carrera, Tony Martin quien se fue con el con más piernas que cabeza, David de la Fuente y Kevin Seeldraeyers (Quick Step). Fueron literalmente fulminados por los Liquigas y su descenso. Y fue cuando tomaban los ciclistas esa posición en la que no nos gustaría vernos, cuando el grupo se partió en varios más. Purito se conjuró con Tony Martin, Scarponi y Chavanel para seguir la estela del AVE Liquigas y perdió en meta 17”. Como él indica, algo que no habría debido suceder.

Darío Novo

@Dario_Novo