La pregunta surge de
forma natural: ¿qué ha tenido para Hacienda esta peculiar forma para hacerse
con un club de fútbol? A finales de junio de 2003, la Fiscalía Anticorrupción
presentaba una nueva querella criminal ante la Audiencia Nacional contra Jesús Gil
–ya expresidente- y su hijo, acusándoles de haber defraudado a Hacienda 12,8
millones de euros entre 1997 y 1999 a través de la entidad rojiblanca y su
empresa Promociones Futbolísticas. Los Gil se enfrentaban a cuatro delitos
contra la Hacienda pública. Además de uno de administración desleal y falsedad
contable y otro de insolvencia fraudulenta. Los detalles llegará a su tiempo.
Sin embargo, la
historia de esta peculiar SAD no había terminado todavía, pues, en busca de una
supuesta estabilidad económica, el club gestó en la primavera de 2003 una
ampliación de capital de 36 millones de euros. El objetivo, supuestamente, era
abrir el club a su masa social y disponer de dinero efectivo para saldar
cuentas que exigían urgencia.
No obstante, el fiscal
Castresana se opuso a la ampliación. A pesar de ello, la Audiencia Nacional
concedió el 19 de junio el permiso para realizarla, aunque con condiciones: Jesús
Gil y Enrique Cerezo debían abonar previamente los 11,72 millones de euros, equivalente
al 95% de las acciones que adquirieron, fraudulentamente durante la
transformación en SAD, según rezaba la sentencia.
A finales de junio, la
Junta de accionistas aprobó la ampliación de capital. Con gran sorpresa,
durante esta sesión, las 236.000 acciones embargadas en febrero resucitaron su
capacidad política y fueron definitivas para aprobar la ampliación en los
términos que la familia Gil deseaba. ¿Cómo era posible que unas acciones
embargadas tuvieran capacidad de decisión? La única explicación era que Gil y
Cerezo habían avalado los 11,72 millones de euros, recuperando (es decir,
desembargando) las acciones y con ellas el poder en la Junta. Se aprobó la
ampliación de capital de 22 millones de euros por “compensación de créditos”,
en un primer tramo, y la capitalización por “aportación dineraria” de 14
millones de euros, en un segundo. Veámoslo con todos los detalles.
Gregorio
Martín
Lo que el fútbol se llevó
Ir a la primera parte de Gil y el Atlético de Madrid SAD (I)
Ir a la segunda parte de Gil y el Atlético de Madrid SAD( II)
Ir a la tercera parte de Gil y el Atlético de Madrid SAD (III)
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