Una rampa al cielo
Purito gana su segunda etapa en una nueva cuesta infernal tras Jaén. Las bonificaciones y la ventaja final le colocan con el maillot rojo de líder.
Paralela a la Cañada Nueva, el muro infernal donde ayer se decidió la etapa, se encuentra la llamada Cuesta de las Nieves. Es habitual entre la gente del lugar, que al salir a la misma de las calles paralelas, hagan sonar el claxon del vehículo para avisar a quienes bajan por ella. Perdón, no había explicado la diferencia: en este caso es de bajada. Ayer Purito lanzó un ataque de claxon y de genio. Es en estas rampas donde se diferencia ese punto de más que llevan los favoritos, las que criban de manera insolente e inconsolable a los que son y a los que no. Estuvieron todos los favoritos, incluido Igor Antón quien parece haber tenido una recuperación milagrosa que, desgraciadamente y con toda la intención de mi equívoco, de poco lo servirá.
Fue un final de tener grabado, de rampas tan duras de las que te preguntas en casa si no llegarán mejor andando, pobres. La carrera, previas escapadas diarias, se lanzó en la subida al puerto de San Lorenzo, primer paso de esta localidad. Ahí se acabó todo tipo de fuga posible, los Cofidis se pusieron manos a la obra para acabar en un descenso épico y unas velocidades posteriores previas a la subida que nos hicieron recordarles que las pancartas de las fiestas del pueblo no son sprints intermedios. La subida en la zona adoquinada a 1,5 km de meta nos auguraba un final de lo mejor entre lo mejor. Cada favorito con su delfín, y Van der Broeck, tremendo, se colocó a la cabeza de este pequeño pelotón de favoritos. El helicóptero nos daba una estupenda imagen de la colocación, del estrechamiento de las carreteras y la reducción paulatina de velocidad de los corredores mostraba esa dureza de las rampas en las que estaba en cabeza Scarponi y en las que dejó Purito al resto de favoritos, una vez caídos los fieles espaderos. Dicen las malas lenguas que de haber llegado a estas rampas, Cavendish estaría a estas horas subiendo. Cosas del ciclismo.
Bonificaciones y maillot.
Reconozcamos el papel digno de Chavanel estos días. Un corredor alegre que aguantó como los líderes que fueron, hasta ayer. La cara de tremendo esfuerzo por el día, junto al maillot abierto en el final de la etapa le han dado matiz de tragedia a su pérdida del liderato: brindemos por los valientes. Se colocó líder Joaquim Rodríguez gracias al hueco que abrió en la escalada de San Lorenzo y a las bonificaciones que nos parece como tener perros en la comunidad: nos molestan los de los vecinos pero no importa el ladrido del nuestro. Se plantea pues una nueva situación de carrera (Nibali a 45”, Scarponi a 51”, Van der Broeck a 56”) en la que todos mirarán hoy a la Covatilla y Wiggins a la crono de Salamanca.
Darío Novo
@Dario_Novo
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